«El más perjudicado es el pueblo de Córdoba, pero después soy yo, que con todo el equipo no vamos a poder festejar una elección maravillosa. Somos justos ganadores, pero todavía falta el 10%», dijo.
Llaryora habló en el búnker ubicado en Quórum, que se encontraba repleto de militantes, dirigentes y periodistas. Sobre el escenario sólo estuvo su vice Myrian Prunotto y solo un momento subió para saludar Daniel Passerini. Se encontraba en el recinto el gobernador Juan Schiaretti pero no se mostró ni habló a la concurrencia.
Llaryora expresó que «desde hoy empieza una nueva generación que se animó a hacer una coalición, de tal manera que hoy no podemos decir que es un triunfo del justicialismo, sino de este partido cordobés» y finalizo diciendo: «Lo que tendría que ser para nosotros una fiesta de la democracia se ve empañada porque los resultados no están».