Joaquín Speranti Flores, de 14 años, quien era intensamente buscado, fue encontrado muerto en un domicilio de la ciudad de Laboulaye.
La principal hipótesis de investigación es que se trataría de un homicidio y el presunto autor sería un menor de edad, un chico de 13 años quien tenía el celular de Joaquín. En ese sentido, este menor habría dicho que Joaquín se lo había dado. Según trascendió, el chico sospechado ahora por el crimen habría terminado contando todo.
Joaquín se había ausentado de su hogar el jueves 29 de junio.
Según se informó, el adolescente debía asistir al colegio Ipem Nº 278 “Malvinas Argentinas”. Desapareció en horas de la tarde. Su familia radicó la denuncia ese mismo día.
Este sábado en horas de la tarde, una gran cantidad de personas se había congregado para pedir por la aparición con vida de Joaquín. Familiares y vecinos de Laboulaye caminaron por las distintas arterias de la localidad y confluyeron en la Jefatura de la Unidad Regional Departamental.