El villamariense que enamoró a una rusa y se casó con ella

«Quiero una rusa», dijo, y lo logró. Conocé la historia de Alejandro Muñoz, el villamariense que se propuso conquistar a una mujer rusa y luego de conseguirlo la desposó en Villa María.

Todo comenzó hace ya algunos años, luego de varias decepciones amorosas y un viaje a Cuba. Allí conoció a varias mujeres oriundas de Rusia y se convenció de que su pareja definitiva debía provenir de aquellos fríos pagos.

A pesar de la falta de apoyo de su familia y amigos, quienes descreían de su propósito y lo subestimaron, Alejandro no los escuchó y se puso manos a la obra.

Se descargó una aplicación de citas llamada Russian Cupid y allí conoció a Veronika Anatolievna Garssia, con quien se comunicaba mediante el traductor de Google.

Tras unos meses de amor por chat, finalmente se conocieron en Buenos Aires, donde el romance se volvió presencial. La vuelta de Veronika a su país se postergó por la guerra entre Rusia y Ucrania, lo que les dio aún más tiempo para compartir.

En este lapso, Alejandro llevó a su amada a Córdoba y a Villa María, donde la presentó familiares y amigos. Nuevamente, pese a la resistencia, el villamariense tenía en claro su objetivo y no se dejó llevar por terceros.

Al parecer, el flechazo fue mutuo. Cuando Veronika volvía a su tierra, decidió en pleno vuelo que quería vivir junto a aquel cordobés con alopecia que la enamoró mostrándole canciones de folklore en plena pandemia.

El 18 de febrero de 2023, un año después de su primer encuentro en Buenos Aires, esta pareja internacional se casó en suelo argentino.

Actualmente Veronika trabaja a distancia para una empresa rusa, pero también tiene su propio local para hacer pestañas y cejas en Villa María. Junto a Alejandro, buscan tener un hijo y agrandar la familia.